torsdag, januar 26, 2006

Versátil

Mis vacaciones empezaron en un auto que partía a Punta del Este el 25 de Diciembre, cuyos parlantes bullían de Aztor Piazzolla y su dosporcuatro. Durante las rutas girába entre él y mi aparatito blanco, que ponía en el borde de mis orejas sonidos raros que provenía de guitarras y de la voz de Thom Yorke.
Llegamos a la playa y me di cuenta de que la arena estaba teñida de temas de Arbol, que me invitaban a vomitar flores sobre la piel de cualquiera, y de Verónicas de Calamaro.
Cuando caía el sol, antes de salir, el departamento se llenaba de olor a mujer recién bañada, de *quemepongos* y de pop del bueno, de la mano de las últimas confesiones de Madonna. Cantar a los gritos que yo no me robé a tu novio [gracias ashlee por la poesía (?)] y suspirar por Robbie Williams al son de su strip tease muscular.
Pasaron los días y los sets de Hernán Cattáneo y Sasha se volvían ley a la noche. Los Wailers nos dejaron en banda una tarde, con ganas de preguntarle al mundo *Is this love?*, pero ya le habíamos dado fuego a Charly, así que nada nos importaba.
Volví de Punta del Este con Pulp en los oídos, lets all met up in the year 2000 y recordando mis trece al son de The Cure, porque era Viernes y aunque no me había enamorado, me volvía para más.
Llegué a Córdoba y mi casa y mi compu me esperaban para matarme con la voz de Beth Gibbons y las guitarras de Jimi Hendrix. Esta Little Miss Strange es así por algo, y había que hacerle honor a su nombre. Ese sábado me dí una panzada de música irreconocible, que provenía de discos de pasta que sonaban allá donde vivía Tancacha, y reproducían Gardel viejísimo y música hawaiana.
Partí para el Sur con una madre que maneja al son de Silvio Rodríguez y sus amigos, una Carito, un Unicornio, un Pablo Milanés. Te doy una canción, y hago un discurso, y después saltábamos directamente a Serú Girán, o a Jorge Drexler.
Allá me encontré con boliches que me hicieron acordar lo que era *salir a bailar*, porque desde Jean Carlos, hasta cumbia de Amar Azul, y toda toda toda la noche moviendo la colita. (?) Conocimos un hombrecito que según mi amiga J. era parecido a Ringo Starr y según la Little Miss era parecido a George Harrison, pero que cantaba en una banda temas de Pink Floyd y Rolling Stones. Amaneceres gritando canciones de hip hop baratas y atendiendo teléfonos públicos que no sonaban.
Love, love me do, volvimos a Córdoba por una ruta larguísima, interminable, directa a lo más profundo de la nada, despojada, que te hacía sentir abrumadoramente libre. Aturdidamente solo. Y era preciosa. Porque estaba cantada por Calamaro, y con bajos de Pedro Aznar. Algunas veces sonaba medio rara porque its oh so quiet, y sh... sh... y la Piaf te habla de amores color rosa y de Milords incomprendidos. Louis Armostrong y su trompeta chillan que summertime, and the living is easy...

Pero se acabó. Vuelta a la rutina y al hogar dulce hogar. Decí que sigo teniendo equipo de música, no?

[Gracias a mi prima
Madame Mim y a mi amiga J. por vacaciones inolvidables!]

4 kommentarer:

Anonym sagde ...

está bueno de más como para agregar algo...


=)

Jotafrisco sagde ...

Qué lindo irse de vacaciones con Madame Mim... No, nada.

El Keyser sagde ...

Me encantó el relato de temporada ociosa, adornado de íconos musicales y sonidos que definen lo tan "strange" que es esta miss... Felicitaciones..

Anonym sagde ...

Hello. And Bye.

I am not young enough to know everything.
·Oscar Wilde·

Soy Fotógrafa.

Ya fue